“No hay necesidad de sentirnos culpables si la furia nos asalta; lo importante es percatarse de su presencia y no permitir que nos atrape y nos maneje. El objetivo de ésta poderosa emoción no reside tanto en dañar a los demás como en eliminar los obstáculos que parecen interferir en nuestro camino.”
La esencia del buen coaching es fomentar la conciencia y la responsabilidad personal, mediante la práctica diaria y la adquisición de habilidades. ¿Te atreves?
Me parece interesante el comentario para conocer mas y emitir mi punto de vista
Conocernos más, emitir nuestros puntos de vista, …..esto es desarrollo personal.
Gracias Ignacio